Quizás la búsqueda de aquello que parece ser lo más importante no nos deje ver las cosas más pequeñas y sencillas, quizás incluso algunas carentes de significado, que a nuestro alrededor diariamente conviven con nosotros.
Por eso en mis paseos diarios por Madrid, aparte de ver y fotografiar los monumentos que a mi paso, consciente o inconscientemente guiado, van surgiendo, también intento ver aquello que otros expresan, me guste o no.
Muchas de esas expresiones se reflejan en carteles que anuncian un bar o restaurante; otros son imaginación pura y dura llevada hasta el establecimiento y otras, en el mas puro estilo del abuso callejero, grafitis que ocupan puertas metálicas y otras telas urbanas muchas veces, por no decir todas, de forma totalmente ilegal y dañando el patrimonio.
Por ello he decidido que todo aquello que este pintado sobre puertas de madera y fachadas de viviendas no saldrá en el blog.
Hay de todo; y andando por las callejuelas del Madrid de la plaza de Santo Domingo, las calles del Pez, Leganitos y otras se ven infinidad de estas cosas que en las avenidas principales no están.
CARTELES, GRAFITIS Y OTRAS COSAS DEL DIA DE HOY TRES DE FEBRERO
Estas dos salamanquesas nos invitan a una cena intima en un restaurante.
Pensativo esta el amigo. Quizás este intentando averiguar quien le ha contagiado la malaria.
Los carteles publicitarios ocupan amontonados unos sobre otros cualquier rincón. Mañana seguramente estos estén cubiertos por otras capas de cola y papel.
Yo también.
No se si en este caso el pobre Rocinante no estará deseando que llegue la hora de comer para descansar después de la cabalgada de los molinos. En un restaurante.
Depende como se mire este grafitis se ven dos cosas distintas. Una nadando hacia el cielo un pez; la otra un elefante como la mama de Dumbo. ¿Lo apreciáis?
Pasajes castizos de un Madrid que ya no existe.
El pobre pájaro haciendo equilibrios sobre un tronco. Parece una caricatura de la actualidad de este país. Todos hacemos filigranas.
La verdad es que da miedo. Pero hay un detalle y son las pegatinas que hay en la parte inferior. Se repite en todas las puertas. Cuando se levanta queda a la vista y la gente las puede ver.
Y si la comida es buena...... genial
Esperemos que este Platero sea tan bueno como el otro gran Platero y yo.
Los hay ilusos...
Siempre he creído que España se escribía con eñe, pero esta claro que estos tienen un teclado ingles para hacer los carteles.
Desde luego es ingenioso; pero muy tacaño también. ¿Como puede pretenderse que un jamón tenga larga vida? Y menos si es de Jabugo y pata negra de bellota.
Por ultimo este anuncio de una tienda en su fachada. El día que se les ocurrió debía hacer un aire de mil demonios. Fantasía fantástica.
Hasta pronto.
Sed felices.
Antonio
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