viernes, 1 de febrero de 2013

LA ARDILLA QUE TENIA GANAS DE COMER.-

 
 
Mi amigo Luis me ha invitado a pasear juntos un rato por el botánico esta mañana y eso me ha dado la oportunidad de fotografiar está hambrienta ardilla, que olvidando sus temores, ha sido capaz de pasearse por delante nuestro como si estatuas fuésemos.
Ha comenzado primero a pasearse por un alto árbol para posteriormente descender por el mismo, incluso saltando según bajaba, hasta el suelo.

 
DSC_2480_2
 
 
 
DSC_2482_2
 
 
DSC_2486_2
 
 
DSC_2488_1
 
 
DSC_2491
 
 
DSC_2492_1
 
 
DSC_2495_1
 
 
 
DSC_2497_2
 
 
 
 
Una vez allí, se ha perdido en la espesura de una especie campo de coles y a los segundos ha salido con una especie de nuez entre la boca.
Corriendo ha subido hasta la rama de un árbol y allí se ha puesto a comer tranquilamente.
La segunda vez, cambiando de árbol, ha vuelto a bajar al suelo. Ha tomado en su boca una especie de nuez que tenia la pinta de una trufa.
Luego se ha acercado más a mí y encaramada a un granado ha estado contemplando los alrededores antes de decidirse a correr por el suelo y subirse a un alto olmo a comer el codiciado fruto.
 



DSC_2505_1
 
 
DSC_2506_1
 
 
DSC_2507_1
 
 
 
DSC_2508_1
 
 
DSC_2509_1
 
 
DSC_2510
 
 
DSC_2511_1
 
 
 
DSC_2514_1
 
Llevaba un doscientos en la cámara y no he podido acercarme más. Pero las cosas surgen así y así hay que tomarlas, con tranquilidad. Si mi amigo Luis no me hubiera animado a ir al botánico, no la hubiera ni siquiera visto.
Buen día a todos. Sed felices.
Antonio

No hay comentarios:

Publicar un comentario