Ayer al salir de casa me fije que las adelfas estaban preciosas y no me quedo más remedio que fotografiarlas.
Sabía que me iba a encontrar de repente con un mundo completamente distinto donde lo secano y árido es lo normal en estas fechas; bueno era lo normal hasta estas fechas pues hoy ya estamos a 25 grados y mañana anuncian mas bajada de temperaturas.
La tarde aun era calurosa ayer y se agradecía una ligera brisa que descendía de los picos altos de la sierra, como Cabeza Lijar, que estaba justo encima mío.
Al encontrarme con las espigas altas de las gramíneas, que ya han soltado sus semillas y que aún conservan sus envolturas, decidí meterme entre ellas a ver qué me encontraba.
(Sigo buscando las empusas y las mantis, pero ni una ni otra aparecen aun entre las hierbas.)
Lo que vi no era demasiado espectacular, pero creo que todo en la naturaleza presenta siempre algo interesante. Si no es el color puede ser la luz o la sombra o incluso la postura o la acción.
Todo es un constante movimiento a tu alrededor que hace aun mas difícil fotografiar estos pequeños insectos y arácnidos.
Os dejo las fotos, espero que os gusten.
Buenas vacaciones a los que las tomáis hoy y a los demás animo, mucho ánimo.
Sed felices.
Antonio
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