miércoles, 31 de agosto de 2016

Espigas al borde del camino, Soledad.

Me gusta andar por los caminos serranos cuando las espigas de los cereales silvestres comienzan a perder sus semillas y trasladan a la tierra la vida.


Un mundo de multitud de cañas y cascaras de semillas vacías inundan los bordes y se adentran a veces en las parcelas abandonadas a la vera de la tierra comprimida por el paso, durante siglos, de los hombres y los animales.


Hay un compendio entre vida y muerte para darse la mano en esos instantes. La muerte del cereal combinado con la vida que aporta en su interior la semilla. Vida y muerte de la mano, jugando con el tiempo.


A mí, se me ocurre pensar que esas semillas a punto de desprenderse de sus cascaras pueden significar de alguna manera la reencarnación de los elementos; pero es solo un pensamiento fugaz. Quizás es más bonito pensar, como escribía mi amiga Silvia, que es un intercambio de energía, ya que la materia al fin y al cabo lo es, y por lo tanto vida y muerte son una trasformación de la misma.


Algunas florecillas comparten con las espigas la poca humedad que aún queda en el suelo. Sus colores dan vida al ambiente y rompen la monotonía del paisaje plateado y seco de las cunetas. Y algún insecto con su vuelo despistado, sobre todo las mariposas, terminan por confirmar la existencia de vida en los alrededores.


Tendrán que llegar las tormentas de finales de agosto o principios de septiembre para que veamos de nuevo convertirse esos laterales del camino en estrechas y verdes praderas donde comenzaran de nuevo a florecer en un intento ultimo por reproducirse infinidad de pequeñas flores buscando su sitio.


Y cuando esto suceda no quedara ni rastro de las espigas caídas al suelo bajo el peso del agua y el empuje del aire. Habrá que esperar a la llegada de la primavera alta para verlas surgir fuertes y brillantes de nuevo a la vera del camino.


Quizá tu, Soledad, seas una espiga en la cuneta.


Sed felices

Antonio 

lunes, 29 de agosto de 2016

Como han fotografiado mis camaras los insectos de 2016. I.-


LOS INSECTOS DE ESTE VERANO DE 2016. I.-

Como todos sabéis mi profesión no es la de entomólogo, pero tengo la suerte de que me encantan dos cosas: una son estos maravillosos seres de seis y ocho patas y la otra que me gusta fotografiarlos.


Heliotaurus ruficollis, un precioso coleóptero que le encantan las margaritas.

¿Por qué? No lo sé. La primera vez que fotografié un insecto fue a una mariquita, en un cerro encima de Alcalá de Henares, un día sin viento esperando soltar mis veleros de aeromodelismo a volar. Desde entonces, desde que aquel fantástico bicho me indico que existía un mundo de criaturas infinitamente más pequeñas que nosotros, me convertí de alguna forma en un fan y hoy en día no entendería mi vida  si rompiese mi contacto con ellos.

 Esta mosca Sphaerophoria scripta, le gusta realizar vuelos estáticos vigilando su territorio.

Sin ellos, la vida tal como existe hoy no sería igual, la polinización seria dificultosa y muchas especies vegetales morirían sin tener a nadie que las polinizase. Por ello se deberíamos  estar mucho más atentos a los insecticidas con los que combatimos las plagas.
Este mundo, por otro lado, me ha proporcionado amigos, gente que al igual que a mi les atraen estos gigantes pequeñines, estupendas personas que me enseñan, me acurrucan, por así decirlo, en su experiencia, siempre muy superior a la mía.
Gracias a ellos he encontrado insectos que no podía ni siquiera imaginar y arácnidos que para mí siempre habían pasado desapercibidos. Desde el descubrimiento de la puesta de una crisopa, aisladas en pequeños filamentos en una ramita, a las magnificas puestas de mariposas y chinches perfectamente ordenadas, pasando por arañas grandes y pequeñas, todo gracias a  gente que, sin mediar interés de ningún tipo, les gusta ayudar y dar a conocer ese maravilloso mundo.
Hoy, dedicado especialmente a ellos, ni siquiera hace falta nombrarlos, esta entrada. Ella es parte de  una  serie que expondrá insectos y arácnidos fotografiados a lo largo del verano de 2016.

Esta Ameles, primo cercano de las mantis, observa dispuesta a dar el primer bocado.

No voy a ser un rancio profesor explicando cada bicho; es mucho mejor verlo, saborearlo con los ojos y pensar en cómo son y cómo viven. El que quiera más, puede empezar buscando los nombres en la RED y allí encontrará de todo.
Mi ilusión es enseñar con la vista, aprender con la vista, pues los ojos son el primer camino para comprender,  las letras son para los entendidos y los que saben escribir.

Chrysis ignita, una pequeña avispa de colores multicolores y muy inquieta.

Empiezan las fotos en el mes de junio y siguen, todas, un orden cronológico de fecha e incluso de hora. Villanueva del Pardillo, Guadarrama, cada una de las distintas quedadas con los bicheros, todo irá apareciendo en esta serie que comienza hoy.

Oruga de una avispa de la familia Cimbex sp, fotografiada cerca de Colmenar Viejo.

Una de mis moscas favoritas, la Eristalis tenax. Grande y bonita.

Heliothea discoidaria esuna preciosa mariposa nocturna que se poso para que la fotografiase.


Esta extraña cabeza pertenece a una hormiga león adulta.

Si hace unos años hubiese visto esta Lycosidae hispánica, hubiera salido corriendo.


Melitaea phoebe, una preciosidad de mariposa. 

 Nemoptera bipennis, el "Duende de la pradera", un maravilloso insecto que he conocido este año.


Siempre que se ven en una flor estan comiendo como posesos estos escarabajos: Oxythyrea funesta Poda.


Esta pequeña y preciosa araña es una Phylaeus, miniatura bellísima.


Tituboea sexmaculata, otro escarabajo delas flores maravilloso.

Hasta aquí los quince primeros amigos.
No se que vendrá a continuación y si se repetirá algún individuo fotografiado en otro lugar; en todo caso servirá para repasar.

Sed felices.

Antonio 

domingo, 28 de agosto de 2016

Por la veras de los caminos en blanco y negro.

Voy caminando por caminos y sendas que huelen a tierra seca, a polvo.
En sus cunetas, las hierbas más secas aun que la propia tierra comienzan su declive final.


Solo de vez en cuando una achicoria violeta o amarilla iluminan con su color el paisaje.


El resto es una sucesiva comunión de contrastes amarillentos de semillas tostadas por el sol implacable.


Miro a estas y pienso cuan breve es su existencia. Luego medito y me doy cuenta que estoy presenciando la vida y la muerte al unísono.
Cada semilla es el comienzo de una nueva posible vida vegetal, el esperma que acariciara a la tierra para hacer brotar una nueva planta.


Hoy he dejado los colores y me he pasado a las tonalidades del blanco y negro. He revivido por un rato aquellos tiempos de revelado en el cuarto oscuro.


¡Como pasa el tiempo! Nuestro tiempo es como el de las semillas. En nuestros relojes respecto a la eternidad somos otro instante.


¡Si! Como pasa. Miro hacia atrás y me asusta la cantidad de instantes que han quedado sumidos en el bendito sueño del olvido. 



Otros por el contrario permanecen aun jóvenes como si los hubiese vivido hoy.


Ya no tenemos la costumbre de ver en tonos grises. Quizá por eso he querido colocar estas fotografías así, quizás porque ahora estoy pasando un momento gris.


Sed felices.

Antonio

sábado, 27 de agosto de 2016

Flores con poesía CCLXXXI: La puerta

Nació nuestro poeta en la ciudad coruñesa de El Ferrol allá por el año de mil novecientos seis.
Nacido Dictinio de Castillo Elejabeytia al lado del mar, estudio en su ciudad natal y se licenció en Derecho en la universidad de Santiago de Compostela a la vez que realizó su carrera militar en la Marín.


Estaba de servicio en Cartagena en el momento del estallido de la Guerra Civil  y como no fue acusado por los republicanos, al terminar la guerra los nacionales le retiraron del servicio en l marina.
Estudio entonces en Murcia la carrera de Filosofía y Letras y se especializo como profesor de Filología portuguesa.
En mil  novecientos cincuenta y tres emigra a Alemania y allí comienza como lector de Lengua y Literatura Españolas, profesión que realizará a lo largo de treinta años en la universidad de Würtzburg.
Dictinio de Castillo Elejabeytia es un poeta postmodernista fantástico, que sabe expresar y trasmitir tanto con estrofas modernas como clásicas a la vez. Su poesía es francamente vibrante, expresiva, calidad y muy personal.
Colaboró en infinidad de revistas y publicaciones de poesía como Fantasía, Acanto, Verbo, Azarbe etc.
Premio Adonaís por el libro titulado Canción de los pinos en mil novecientos cuarenta y cinco entre los muchos que obtuvo.
Uno de sus últimos libros publicados fue Vuelo hacia dentro.


Murió en Heidelberg, Alemania, en octubre de mil novecientos ochenta y siete.
Os he colocado un poema suyo que discurre por la realidad de la vida y de la muerte.


LA PUERTA

Oh puerta de mi casa, tan blanca y reluciente,
abierta siempre a todos los que quieran entrar;
con la brisa de junio, una aurora rosada,
llegó hasta ti la alondra de la felicidad.


Otros días de otoño, la muerte, lentamente,
vago entre los geranios de tu florido umbral,
y entonces hallé penas, y el más amargo llanto
me saturó de bruma, de dolor y orfandad.


Esperé muchas noches, apoyando en tus jambas,
ver venir un viajero hacia mi soledad,
el cansado viajero que bajo las estrellas
se dirige a nosotros desde un lejano mar.


Mas no esperé sin fruto, oh puerta silenciosa;
por fin llego el amigo a quien brindé mi paz;
le ofrecí de mi aljibe agua limpia y fresca
y un asiento en mis lares. El compartió mi pan.


Oh puerta de mi alma, de par en par abierta,
que a los tristes prometes el calor de mi hogar;
da tu luz a mi vida, tu dintel a mi norma,
a mis aves ligeras tu amoroso nidal,


y esa tarde sombría en que salga el cortejo
para en la tierra madre mi cuerpo sepultar,
ciérrate suavemente y guarda mi memoria
entre las viejas cosas que el tiempo destruirá.
--o0o--



Nada mas por hoy.
Sed felices.

Antonio

viernes, 26 de agosto de 2016

InsectPrak: un mundo de mariposas y otros insectos a nuestro alcance

Comencemos por situarnos.
Cerca de San Lorenzo de El Escorial y de la carretera M-600, que une Guadarrama con El Escorial, se encuentra InsectPark, según os indico en el plano adjunto.


Adentrarse por la carretera que sube a Abantos, en medio del fantástico pinar y a menos de cien metros de la carretera M-600, y encontrarse de repente con una ventana en la que luce un esplendido escarabajo es señal de que algo bueno y fantástico se esconde dentro del lugar.



Y según te vas acercando al edificio de InsectPark y comienzas a ver las ventanas llenas de mariposas de mil colores distintos comprendes que definitivamente has acertado y que dentro vas a encontrar algo fantástico.
Y así ha sido.
En la sala de recepción existen una serie de dioramas con insectos vivos en su interior que te dejan maravillado. Insectos palo, insectos hoja etc. se mueven dentro de sus cajas perfectamente cuidadas y a temperatura estable.
No saque fotos de ellas al no poder utilizar el flas y la luz no era lo mejor para fotografiarlos.
Un enorme expositor donde una serie de pinos dan cobijo a las mariposas Isabelas, que se reproducen en los pinares de la sierra madrileña de espectaculares medidas y dimensiones. En época de vuelo y reproducción se las puede ver vivas dentro de dicho espacio.

1.- Mariposas de España

Una vez dentro de la siguiente sala aparecen unos expositores en los que se van indicando las distintas mariposas que se pueden ver en la Península.


















2.- Mariposas en riesgo.
Otros exponen mariposas en grave riesgo de desaparición por la destrucción por parte del hombre de sus zonas de reproducción y alimentación.






3.-Mariposas y sus orugas.
Un interesante expositor es aquel en el que están expuestas las mariposas y las orugas de las que provienen. Es curioso observar a ambos juntos en el expositor.










Al final de la sala, unas escaleras nos conducen a las dos salas inferiores donde se exponen colecciones de insectos del todo el mundo y unos videoramas con arañas e insectos raros vivos.

4.- Mariposas del mundo.

Es fantástica la colección de mariposas de países de América, Asia y Oceanía con unos colores llamativos, unos enormes tamaños y uno diseños maravillosos.









5.- Insectos de todo tipo y de infinidad de países.

Libélulas maravillosas de todo el mundo comparten expositores cercanos con nuestras empusas y mantis.
















Escarabajos de todos los tamaños están presentes y algunos de considerable envergadura.

6.- Arañas de gran tamaño en sus terrarios calefactados.

Las arañas peludas americanas en sus terrarios son espectaculares.




Vale la pena ir. Los críos salen encantados de la visita y los mayores tenemos un lugar donde disfrutar y aprender si nos gusta el mundo de los insectos y los arácnidos.
Esta ha sido toda parte de la vivencia que sentí  en la visita.
No os he colocado nombres, esto es solo una muestra, la lección está entre las cuatro paredes.
Durante el verano se que abren de miércoles a domingo por la mañana y la tarde. Lunes y martes está cerrado.
De todas maneras tiene  una dirección en la Red que es http://insectpark.es/ donde os podréis informar perfectamente.
Mas adelante, un día que vaya solo, os completare el reportaje fotográfico.
Buen día a todos.
Sed felices

Antonio