miércoles, 31 de julio de 2013

FLORES CON POESIA CV.- Soneto amoroso

 
Nuestro poeta, castellano, nace en Madrid en mil novecientos quince. Estudio en la capital de España con educación alemana, pasando posteriormente a la Universidad Complutense donde se doctoro en Filosofía y Letras.
 
 
 
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Germán Bleiberg colaboró en la revista Occidente y en el momento de estallar la Guerra Civil se puso de parte del bando republicano con el colaboro activamente. En mil novecientos treinta y ocho se le concedió el Premio Nacional de Literatura junto a Miguel Hernández.
Al final de la guerra se exilia a Estados Unidos donde dará clases en universidades norteamericanas.
Su obra alejada del modernismo es cálida. Sabe acercarse con sus versos y expresar con claridad las ideas que propone.
 
 
 
 
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De sus obras destacar El cantar de la noche, Sonetos amorosos, de los cuales os coloco uno hoy, Mas allá de las ruinas, El poeta ausente, La mutua primavera etc.
Retorno a España y murió en Madrid en mil novecientos noventa.
 
 
 
SONETO AMOROSO
 
 
 
Frondosa luz se eleva de tu cielo
con alas que confirman tu ternura,
y la brisa encendiéndose es la pura
afirmación serena de tu vuelo.
 
 
 
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¡Oh claridad paciente de mi anhelo!
¡Oh tus ojos floridos! ¡La dulzura
del corazón, que en soledad segura
te piensa entre tu olvido y mi desvelo!
 
 
 
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¿Dónde la anunciación de primavera?
¿Dónde la noche tiembla en tu mirada?
¿Dónde tu sangre ausente persevera?
 
 
 
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Nocturna llama, súbita, colmada,
la luz amante de febril ceguera.
¡Tus ojos siempre, luz martirizada!
--o0o--
 
 
 
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Espero que os haya gustado.
Sed felices.
Antonio

martes, 30 de julio de 2013

AL BORDE DEL CAMINO EN UN DIA DE LLUVIA.-

Le excursión fotográfica del domingo por la tarde termino en aguacero fuerte a tres kilómetros de casa y sin posibilidad de refugiarme en ningún lado, pues ni siquiera había una paridera o corral donde meterse, y por lo tanto la mejor solución era seguir andando intentando que las máquinas de fotografiar no se mojasen.
 
 
 
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El camino en las estribaciones de la sierra y bajo los picos de la Peñota, está en un principio rodeado de árboles para poco a poco convertirse en un páramo donde los conejos buscan desesperados las ultimas briznas de hierba.
No encontré mucho que fotografiar, pero si una muestra de las plantas que los márgenes del camino nos guardaban. Son quizás mis fotografías de siempre, pero cuando se está en un lugar determinado te tienes que agarrar a lo que tienes.
 
 
 
 
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Os voy a contar un secretillo: en el teléfono llevo un programa que me dice la distancia recorrida y la velocidad y desnivel que subo; pues bien en los tres primeros kilómetros de subida haciendo fotos la media fue de unos 2,2 k/h de velocidad media. En la bajada, lloviéndome y con la amenaza de una tormenta la velocidad media de bajada sin hacer fotos se acerco a los 5,75 K/h. Y no os podéis imaginar la tormenta que cayó nada más llegar a casa.
Os dejo con las fotos de un día nublado en la Sierra del Guadarrama.
 
 
 
 
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Los cardos, amigos de calor, se despiertan en estas fechas, floreciendo con preciosas flores que van de los morados a los amarillos, invadiendo las zonas que otras plantas, practicamente secas, les dejan.
 
 
 
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Estos cardos se han secado antes que sus congéneres hayan ni siquiera florecido. En sus flores hace unos días libaban un montón de mariposas que ahora han cambiado su destino.
 
 
 
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Las zarzas, las de cotas mas bajas y soleadas han cambiado sus flores por una moras que en poco tiempo presentaran tonalidades que desde este verde, y pasando por los rojos, nos llevaran a los morados.
 
 
 
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Vida y muerte. El ciclo se repite. Unas plantas en plena floración y otras ya muertas, pero todas preparando una nueva generación que comenzará a surgir con las primeras lluvias de finales de agosto.
 
 
 
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Los distintos tipos de gramíneas salvajes ponen una nota dorada en el borde del camino. Unas gotas de agua de la noche anterior les han quitado algo del polvo del camino, pero la lluvia ha sido lo suficientemente suave como para no tumbarlas.
 
 
 
 
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En algunos lugares, junto a las valla de alguna finca muy cerca de su puerta, crecen las parras que dentro de un mes ofrecerán ya sus frutos practicamente maduros.
 
 
 
 
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La estructura del molinillo, sea de la planta que sea siempre me ha llamado la atención. Esas distribuciones esféricas de sus semillas dan que pensar. Y la composición radial de la semilla para que el aire las transporte como si fuesen helicópteros es fantástica.
 
 
 
 
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Me tengo que dar prisa. Ya me estoy mojando y la Peñota y Siete Picos comienzan a desaparecer tras la manta de agua que allí arriba cae. Cinco minutos después de esta foto me caía agua encima fría y con mucho viento.
Nada mas por hoy, solo desearos que seáis felices.
Antonio

sábado, 27 de julio de 2013

EL PASEO DE AYER TARDE 26 DE JULIO.-

El paseo de ayer tuvo de todo pero con el inconveniente de un viento arremolinado que hacia mecerse violentamente las plantas, con lo cual realizar fotos que saliesen sin estar movidas era difícil de por sí.
Pero como si no se intenta no se consigue, me fui con mis cámaras a dar un paseo acompañado de mi hija y alguna foto se puede ver.
Un paseo tranquilo, serrano, agradable y con una maravillosa temperatura que rondaba los 25º.
El monte tiene los contrastes que se producen en estas fechas; el estiaje y la primavera se dan la mano y en mitad de de una zona de hierbas secas puede verse una bonita flor que reluce o el caparazón de un insecto que ha pasado de la fase de crisálida a ser una maravillosa mariposa.
Las libélulas posadas en sus zonas de descanso colocan sus caras al viento intentando ofrecer la mínima resistencia al mismo mientras descansan.
Y las últimas flores de las zarzas dan cobijo a montones de insectos que buscan afanosamente su alimento y el de sus congéneres pues en ello les va la vida.
Fue un paseo tranquilo, sencillo y divertido… Habrá que repetirlo.
 
 
 
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Espigas y hierbas aun verdes se entremezclan  en estos días llenando de maravillosos tonos y colores las tardes.
 
 
 
 
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Las plantas de las zarzas están cambiando sus flores por unas maravillosas moras que comienzan a mostrarse. Las ultimas flores poco a poco van muriendo dejando su sitio al fruto para el que fueron creadas.
 
 
 
 
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Es tarde, el sol esta cayendo y sus rayos se filtran entre los árboles que rodean los claros del bosque de pinos y robles.
Dentro de poco, esas simientes serán nuevas plantas.
 
 
 
 
 
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Es solo una cáscara, un antiguo envoltorio que le valió a la mariposa mientras no lo fue. Ha dejado el recuerdo de su anterior vida agarrado al árbol que le sirvió de morada en ese maravilloso trance que sufrió.
 
 
 
 
 
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Doradas de por si, sus pequeñas hojas relucen aun mas con el sol de la tarde. Bailan al compás del aire una danza inquieta, con ritmos distintos en función del tiempo y del aire, sin importarles tu presencia.
 
 
 
 
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El tábano está tomando la energía que necesita para la noche de los últimos rayos de sol. El agua refleja en pequeñas esferas luminosas al astro que nos da la vida.
 
 
 
 
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Baile loco de las mieses salvajes.
 
 
 
 
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Alrededor del tallo estas semillas forman un conjunto curioso; el viento las esparcirá con un poco de suerte hasta lugares nuevos que conquistar.
 
 
 
 
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Estas semillas son completamente distintas. Encapsuladas en sus vainas esperan la humedad de las lluvias del otoño para encontrar un terreno apto para criar.
 
 
 
 
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Hay que conseguir un buen puesto para todo, por eso hay que trepar paja arriba donde defender el terreno y encontrar una hembra dispuesta a compartir toda una vida que durara muy poco.
 
 
 
 
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El solecito de la tarde también caldea a la libélula que cogida a amarre pasara la noche ahí. Mañana volverá a volar, cazar y con un poco de suerte a amar.
 
 
 
 
 
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Se hace la noche. Las sombras comienzan a invadir las laderas del pinar que llegan hasta el agua del pantano. La flor esta receptiva esperando a cualquier abejorro que aparezca a polinizarla.
--o0o--
 
Por hoy nada más. Volvere a pasear otra tarde y apareceran rincones distintos, plantas distintas y emociones diferentes. Pero será otro paseo.
Sed felices.

viernes, 26 de julio de 2013

EL BAILE NUPCIAL DE DOS MOSCAS.-

El trabajo de hoy para una persona no especializada en insectos y menos en dípteros es un poco complicado de presentar e incluso puede llegar a resultar algo monótono, pero por intentarlo no se pierde nada y seguro que algo aprenderemos todos de este tema.
Las fotos son del año 2010, un nueve de agosto hacia las seis de la tarde. Recuerdo perfectamente que buscando en un sauce otros bichos de repente vi a estas dos moscas corretear por una varilla sin prestarme atención y al fijarme me di cuenta que allí se estaba produciendo un cortejo nupcial.
Empecé a fotografiar extasiado ante los colores de la hembra que esta infectada por unos acaros de color rojo pegados a su cuerpo y que me imagino al macho le llama poderosamente la atención.
El proceso se repitió un montón de veces y aunque resumió he decidido que en cada explicación pondré una letra mayúscula para no repetir textos y así se hará esto más llevadero,
Perdonar la calidad de las fotos, pero fotografiar a estas dos pequeñisimas moscas que no paraban de moverse con un 60mm macro fue una tarea dificil.
Comencemos:



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A1.- El macho y la hembra se reconocen y juegan uno alrededor del otro.


 
 
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B1.- El macho se acerca despacio con sus patas delanteras extendidas y abiertas.


 
 
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C1.- Palpa a la hembra con cuidado.


 
 
 
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D1.- Ambos levantan las patas delanteras.



 
 
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E1.- El macho sube sobre la hembra


A partir de aquí vuelve a repetirse muchas  veces los mismos movimientos.



 
 
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A2.-


 
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A2.-



 
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A2.-



 
 
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A2.-



 
 
 
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B2.-



 
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B2.-



 
 
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C2.-



 
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C2.-



 
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C2.-



 
 
 
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A3.-




 
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A3.-



 
 
 
 
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C3.-


 
 
 
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A4.-


 
 
 
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B4.-



 
 
 
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C4.-



 
 
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A5.-



 
 
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C5.-


 
 
 
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D5.-



 
 
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E5.-



Este rito se repitió durante por lo menos quince minutos y siempre era exactamente lo mismo. Los ojos parecen tener como líneas horizontales y la portadora de los acaros parce que vaya enjoyada.
Espero no haberos cansado mucho con este casamiento.
Sed felices
Antonio