Como bien decía el otro día un prohombre aragonés “Fotografiar es escribir con la luz y el color” y tiene razón. A mí personalmente me gustaría que mis fotografías escribiesen por si solas y no tener que acompañarlas con palabras.
Hoy el tema va a ser semillas de plantas del campo, pero semillas aun en la planta dispuestas a perderse por los aires y los suelos para producir nuevas generaciones de flores.
En las semillas están todos los genes de las plantas venideras. En ellas se encierran todos los secretos que se han transmitido generación tras generación.
Son capaces de trasmitir el conocimiento del tiempo para sacar sus raíces en el momento apropiado, florecer a su debido tiempo y volver a crear las semillas nuevas.
Quizás vistas de una en una no digan nada, pero cuando se aprecian en su conjunto presentan formas y colores que hablan por sí solas. Lo fácil es sencillamente apretar el gatillo, lo dificil escribir.
Espero que la escritura sea de vuestro agrado.
Dentro de unos días todas ellas estarán en el suelo buscando cobijo en la tierra; un cobijo de vida no de muerte.
Sed felices.
Antonio
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