Ayer, mientras paseaba por el Real Jardín Botánico de Madrid me abstraje de las plantaciones de tulipanes, maravillosos por cierto, y me dedique a buscar fotografías de contraste. Esas fotografías arriesgadas donde juegan tanto las luces como las sombras, los colores y los tonos opuestos y como no la flor a la que fotografías.
El Real Jardín es en estos momentos espectaculares y dentro de unos días aun más, cuando todo esté prácticamente en flor. Los rosales comienzan a despuntar y algunos trepadores ya tienen flores fuera. Los frutales prácticamente han perdido las flores y muchas arbustivas están explotando de color...
En rincones soleados o sombreados, según las horas del día, pueden aparecer narcisos, tulipanes, rododendros, peonias, hibiscos, lirios etc., todos ellos formando una exquisita mezcla de colores y tonos que luchan por destacar del azul del cielo y de los verdes de los grandes árboles que las rodean.
Había muchísima gente fotografiando los tulipanes, pero muy poca se dedicó a los contrastes; me encontré un poco en soledad fuera de las grandes plantaciones de temporada, pero también es cierto que disfrute de la paz de esos maravillosos rincones que tiene el Real Jardín Botánico de Madrid.
Dedicado a mi amigo Luis Fernandez que hoy cumple años.
Dedicado a mi amigo Luis Fernandez que hoy cumple años.
Los contraluces tienen todos su encanto, es saber el punto de toma y tener en cuenta el entorno. Gracias por la dedicación, sabes que me agradan los contraluces. Saludos.
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