FLORES CON POESIA CLXI.- Una ausencia voluntaria.

Nace nuestro poeta de hoy el año mil setecientos treinta y cuatro en Zafra, provincia de Badajoz en España.

Su familia se desplazó a Zamora por lo que gran parte de su juventud la paso en aquellas tierras y terminó sus estudios en Salamanca.

 

 

 

 

Vicente Antonio García de la Huerta se traslado a Madrid donde presentado al Duque de Alba, este le tomo como archivero de su biblioteca, llegando a ser posteriormente oficial primero de la Real Biblioteca.

Tenía que ser un hombre muy instruido ya que apoyado por el duque de Alba entro a formar parte de la Real Academia Española de la Lengua, de la de Historia y de la de San Fernando.

García de la Huerta no fue un gran poeta, pero dejó alguna obra interesante, si bien su mejor forma de escribir estuvo en el teatro. Una de sus obras, Raquel, está considerada la gran tragedia del neoclasicismo español, según algunos autores.

Critico a algunos clásicos españoles, como Cervantes, lo que le valió enfrentarse a Leandro Fernández Moratín, Forner, Jovellanos…

 

 

 

Metido en política intervino en el motín de Esquilache por lo que huyo a París. Vuelto a España es acusado de conspirar contra el gobierno y es desterrado.

Volvió a Madrid donde murió en mil setecientos ochenta y siete años, jovencísimo.

Os he puesto un soneto que espero que os guste.

 

 

A UNA AUSENCIA VOLUNTARIA 

 

 

Parte a dorar con luces celestiales

de los floridos sotos los primores,

a dar nuevos alientos a las flores

y veneno mortal a los zagales

 

 

 

Yo quedo en el infierno de mis males,

victima del volcán de mis ardores;

lastimoso ejemplar a los pastores

que alcancen mis martirios infernales.

 

 

 

  

 

De nuevas flores tu belleza vista

esas florestas, mientras mi quebranto

fúnebres flores a mi muerte alista.

 

 

 

Ya no te cause mi expresión espanto;

pues si tu las produces con tu vista,

yo también con el riego de mi llanto

--o0o--

 

 

Sed felices.

Antonio